Trazarse una meta no es suficiente, hay que mantenerse enfocado y sortear toda clase de obstáculos y distracciones” Los obstáculos nunca faltan. A pesar de tener clara la meta, siempre existirán obstáculos que nos pueden desviar del camino. Yo les llamo distractores porque nos distraen. Los distractores nos desvían del rumbo elegido. Pueden tratarse de personas, situaciones, emociones, enfermedades, imprevistos,…